POR José Inés Figueroa Vitela
Académicos tamaulipecos organizados, se reunieron el fin de semana en Victoria capital para, primero, conocer el libro que la presenta en su amplio espectro y, después, expresar su adhesión a la doctora CLAUDIA SHEINBAUM PARDO.
El impreso, compendio de entrevistas a la gobernante con licencia de la capital del país, borda desde la congruencia de sus militancias en las mocedades, hasta nuestros tiempos, su perfil humano, su preparación científica, su experiencia pública, en conjunto, la verticalidad de una dama en lo público y en lo privado.
Si con solo conocer medianamente el ejercicio público reciente, CLAUDIA SHEINBAUM ya lideraba las tendencias hacia la sucesión presidencial, abundar en el conocimiento de su entorno personal abonará, seguramente más, a ese posicionamiento.
En la contraparte, los dichos y los hechos protagonizados por la pretendida competencia, de cara a la elección del 2024, igual siguen abriendo brechas.
Desde las campañas para menoscabar el movimiento, como la desacreditación de los libros de texto gratuito, exagerando el impacto de algún tema o error de impresión, hasta promover amparos contra su distribución, que mueve a preguntarse a la gran mayoría de los mexicanos -que ni mínimamente representan los reclamantes- ¿y quien nos amparará contra ustedes y sus frustrados esfuerzos politiqueros?
Hasta los mentados foros, con los que pretenden regresar a la competencia electoral a sus siglas y personajes, apostando a la misma amnesia colectiva con la que saquearon, agredieron y ofendieron al respetable a lo largo del siglo pasado, han significado una confirmación a la vigencia del proceso de transformación que vive el país.
En el más reciente encuentro, celebrado en Monterrey, la ex dirigente nacional priísta, BEATRIZ PAREDES, respecto de aquello, fue muy elocuente y puntual, que de ello nadie le quita mérito.
En síntesis, dijo que ha sido un freno para el desarrollo nacional, “nuestra pequeña visión, de corto plazo, incapacidad de grandeza”, planteando la necesidad de grandes proyectos, como -citó de ejemplo- un puerto en la zona de Baja California para resolver la saturación de la costa Este norteamericana y desarrollar el sur-sureste con un gran fondo de infraestructura nacional.
“Necesitamos una gran estrategia financiera, la reconciliación de México, una alianza entre el Estado Nacional y el sector privado con confianza y Estado de Derecho”, dijo.
En el imaginario colectivo la respuesta fue “sí”, para la corta visión con la que condujeron el país, solo resolviendo la economía de varias generaciones del prianismo qué pasó por el poder y de la saturación portuaria en el este norteamericano se tratan los puertos tamaulipecos, como el de Matamoros que ya se impulsa; lo del sureste mexicano que tanto despreciaron ya lo trabaja AMLO este sexenio, muy por sobre sus críticas y condenas, por cierto.
Y hablar de reconciliación nacional, alentando discordias a partir de noticias falsas, así como adoptar praxis criminales como instrumento de recuperación de la paz nacional -habilitando al exgobernador delincuente como el inspirador y operador de tales amenazas-, acaba de cerrar el círculo del “gracias, pero no gracias”.
Acá ya le dimos vuelta a esa hoja negra de la historia doméstica y en lo que trabajamos es en construir a futuro, cómo bordar en la agenda 20-30 para empezar a revertir el daño al planeta, también causado por las políticas económicas del neoliberalismo, la industrialización sin control y el consumismo a ultranza.
Tema que concitó a la nueva clase política estatal en torno del gobernador AMÉRICO VILLARREAL ANAYA la semana pasada, para unificar criterios y esfuerzos destino de aquello.
Por ahí, decía, fue notoria la participación del alcalde reynosense, CARLOS PEÑA ORTIZ, quien, por cierto, se proyecta entre los primeros que rendirán cuentas a su pueblo; ya corren las invitaciones para su segundo informe de gobierno municipal.
La cita, dice la invitación, es a las 10:00 horas del próximo miércoles 6 de septiembre, en el Teatro Principal del Parque Cultural Reynosa.
En Victoria capital, el anuncio de la asignación de la clave por parte de la Unidad de Inversiones de la Secretaría de Hacienda a la segunda línea del acueducto que viene de la Presa Vicente Guerrero, fue celebrado como la obra misma.
Este paso, significa que será tomada en cuenta para el presupuesto del año próximo y con ello, la garantía de que este AMÉRICO gobernador, repetirá la hazaña que hace más de tres décadas hizo el otro, su padre, de satisfacer una sed acumulda, grave y creciente de los victorenses.
Ya sabemos que el anterior gobierno cabecista no solo cortó la tramitología de largo aliento propia de una obra de esta naturaleza, sino que, además, actuó en contra, con todas las fobias que tenía contra los moradores de estas tierras.
Solo la sensibilidad y gestión del doctor VILLARREAL ANAYA sigue devolviendo la esperanza a los tamaulipecos, con todo el apoyo del Presidente ANDRES MANUEL LÓPEZ OBRADOR.