POR José Inés Figueroa Vitela
Y sí, me citaron como indiciado, en la querella presentada por la diputada local LETICIA SÁNCHEZ GUILLERMO, que asegura la agredí, seguramente con mi mejilla plantada en la palma de su mano.
También estaban convocados para comparecer ante el agente comisionado a la Fiscalía Especializada en la Investigación de Delitos Contra Niñas, Niños y Adolescentes y de Delitos contra Mujeres por Razones de Género, un grupo de diputados panistas.
Ese es el caso de la denuncia presentada por las diputadas morenistas URSULA PATRICIA SALAZAR MOJICA y CASANDRA PRISCILA DE LOS SANTOS, sobre la que otros legisladores también están señalados y convocados para los siguientes días.
De la denuncia por mí presentada por la agresión sufrida, no he sabido mayor cosa; en cambio supe que el Auditor Superior mandó un notificador a un local donde hace tiempo tuve mi oficina particular, ignoro con qué objeto.
Esperemos finalmente se haga justicia y quienes transitaron en el pasado, con el gobernador de triste memoria, se sacudan de su égida y cumplan con la responsabilidad propia del encargo público por el que cobran y cobran muy bien.
Hay quienes se preguntan por qué EL CACHORRO, que regentea las siglas del PAN en Tamaulipas, por encargo y cortesía de aquel mismo, no ha podido reunir el Consejo Estatal partidista.
Una de las tantas versiones, es en el sentido de que, desde finales del sexenio pasado, cuando usufructuaban el poder público estatal, venían completando el quorum a partir de ofrecimientos, que no cumplieron, y amenazas, sobre las que ya no tienen capacidad de cumplirlas.
El sello característico del cabecismo.
Pero, si ya no tienen los instrumentos de coerción y presión que los sostengan en el control de las siglas, cuál es el motivo de que no las hayan entregado ya, se preguntan otros.
La explicación va implícita, precisamente en los motivos de la sesión frustrada, según se asienta en las repuestas del CACHORRIN, a los requerimientos hechos por el exdiputado local y ex funcionario estatal, ARTURO SOTO ALEMÁN.
LUIS RENÉ CANTÚ de GARCÍA y CABEZA DE VACA, quiere que en este pleno le aprueben sus cuentas del año pasado, el presupuesto para este, dar de baja a algunos consejeros y de alta a otros.
Del balance 2022, asegura el dirigente estatal panista, que al partido le ingresaron 75 millones de pesos y se gastó 80, millones.
O se que el angelito dispuso y se gastó en promedio casi 7 millones de pesos, cada mes, el año pasado “libres de polvo y paja”, cerro el ejercicio y todavía le quedaron debiendo cinco millones.
El arqueo, de suyo, es un compendio de revelaciones.
Como el hecho de que durante el año pasado, hasta el mes de la elección de gobernador, en comunicación social y publicidad, lo más que llegaron a gastar en un mes fueron 90 mil pesos y en plena campaña, en abril, bajaron hasta 5 mil, mientras junio, de votaciones 25 mil, pero a partir de julio, se dispararon a 276 mil, cerrando en 316 mil los últimos meses.
¿Se siente el valor postelectoral de la guerra sucia?
¿Por qué reportaría gastos por un millón de pesos en artículos promocionales en octubre, cuando la elección de gobernador estaba totalmente cerrada -iniciaba el nuevo gobierno de la transformación- y de la extraordinaria que luego se dio ni idea había que se daría?
Pero, por supuesto, esas son otras historias sobre las que los panistas seguramente le pedirán cuentas a su dirigente en su oportunidad.
La referencia financiera, sólo atañe a la sospecha de que es la disposición de tales recursos extraordinarios, lo que tiene asido férreamente al encargo al dirigente estatal panista, cuando ya su patrocinador en fuga representa punto menos que nada.
Modificar la estructura colegiada de mando, acaso pretenderá sacar a los críticos de los evidentes yerros con que se ha conducido el partido y meter a dóciles aliados gratuitos o de baja factura.
A DANYA SILVIA ARELY AGUILAR OROZCO, la dirigente del PAN reynosense, de donde surgieron ellos, la pone entre ese grupo de “eliminados”, como renunciante a su militancia y no como demandante de que las cosas se corrijan y se devuelva la dignidad al instituto político, como de hecho se han dado.
Su obstinación por mantenerse en la dirigencia partidista, deriva en una parálisis que le acarreará otros problemas, como la inminencia de los plazos fatales para la aprobación de las plataformas, alianzas y coaliciones para la elección del año entrante.
Ya no por mucho tiempo, con su PAN se la seguirá comiendo.
El lenguaje no verbal, será el faro que oriente a los buscadores de los signos de los tiempos.
De la gira por la frontera, fue muy comentada la foto que se tomó el gobernador AMÉRICO VILLARREAL ANAYA, subida luego a sus redes sociales entre amplias deferencias, con el diputado local BETO GRANADOS y su secretaria de finanzas, ADRIANA LOZANO.
Ambos matamorenses, considerados cuadros destacados del morenismo, para el reto electoral del año entrante.
Ayer se dejó venir a Victoria capital, y fue visto por la sede del Poder Estatal, el alcalde matamorense, MARIO “La Borrega” LÓPEZ, de quien se decía traía a ”la granja” muy inconforme, haciendo barullo.
Ayer también, del líder político estatal se conocieron otras gráficas, de un recorrido en lancha, donde aparece en primer plano, a su diestra, el titular de Comunicación Social, FRANCISCO CUELLAR CARDONA.
Enseguida iban el Secretario General de Gobierno HÉCTOR “Calabazo” VILLEGAS, a quien también hizo los honores ahora que visitó su municipio, y el jefe de la oficina RICARDO GUERRERO.
No siempre la misma estampa, va en el mismo sentido.
El que tenga ojos, que vea… y el que tenga oídos que oiga.
Al que tenga lana, en cambio, que lo sigan trasquilando.