Por: Chano Rangel
Han pasado ya cinco meses de este sexenio, los números a la baja en muchos aspectos económicos dejan claro, que estamos en una recesión económica y que muy posiblemente con el amago de los aranceles esto pegue más fuerte en los próximos meses.
Pero eso no lo es todo, los apoyos sociales, en términos reales, no resuelven la pobreza, tampoco dan un sistema de productividad a quien los recibe, y el aumento de estos ha generado un gran agujero negro en el sistema de las finanzas públicas nacionales.
La renuncia en los primeros días de marzo de Rogelio Ramírez de la O, como secretario de hacienda, dejo claro que no estaba de acuerdo con la política económica, sobre todo con el gasto excesivo en apoyos sociales, como lo dijo desde el principio de la administración, y por lo cual se tuvo que reducir el gasto en un 3.9% del PIB, afectando a estados y municipios en sus proyectos y gasto corriente.
Con la llegada de otro economista Amador Zamora, como secretario de hacienda, se vuelve a dar otro giro a las finanzas de México, pero tampoco es la solución, y el nuevo secretario tendrá que definir seguir dando dinero o estabilizar la economía en todos sus renglones.
Pero no lo es todo, la apuesta a ver quién aguanta más, así como el rival más débil, sigue siendo una decisión temeraria, los aranceles fueron suspendidos otro mes más, no por razones políticas, ni por que México, haya hecho ajustes importantes en seguridad y migración, que, si lo hizo, pero no lo suficiente para exigir componendas en materia comercial.
Los consorcios automotrices como GMC, Ford, Chrysler y las agroindustrias como Monsanto, Pioneer, hicieron sus ajustes y en la poderosa cámara de comercio de Estados Unidos, prácticamente obligaron al mandatario gringo a dar reversa, al menos por 30 días más.
De los 29 extraditados, solo Caro Quintero, era pieza del ajedrez, el gobierno de Estados Unidos no exigió mandar presos, si no ir por los de afuera, y para eso ofreció su apoyo, táctico militar y de sus agencias de seguridad, a lo que México se ha negado, argumentando violaciones a la soberanía nacional.
No hay mucho para donde hacerse lo encontrado en Jalisco, muestra la realidad de las cosas, donde la misma presidente se topó con la realidad del país que gobierna, y los hechos de extradición rompen todos los esquemas del anterior gobierno.
La economía, empleos y desarrollo está en juego, la inversión ha bajado un porcentaje de entre 2% y 6%, números que no se notan y aun no pegan en el bolsillo de los mexicanos, para eso faltan meses, pero después de mitad del año, los síntomas se empezaran a sentir, por lo pronto el dinero circulante esta escaso y el consumo interno ha disminuido de manera gradual, y se está contrayendo la economía mexicana.
La inversión en obra pública del gobierno federal aún no se da, esta sería una manera de incentivar la producción, pero no hay dinero, los programas de sembrando vida, las becas, el apoyo a madres solteras, y los adultos mayores, no generan crecimiento, solo un gasto social abultado, y los empresarios siguen sin meter la mano en las inversiones todo esto a pesar de que en la nueva perspectiva del gobierno por ejemplo invertir en energéticos es rentable, cuando Peña Nieto, la apuesta era de 70 y 30, ahora escaso invertido y ni así se animan los dueños del dinero, no hay garantías legales afirman.
Las fuertes caídas y yerros, solo dejan un solo interrogante ¿aguantara México otra caída? Todo mientras Omar García Harfuch, lucha casi solo, por mantener la seguridad con hilos del país.
Es cuánto.
De Aquello y lo demás…
En el pasado informe de gobierno, del doctor Américo Villarreal Anaya, se dio un espacio para hacer referencia a la máxima casa de estudios de Tamaulipas, la Universidad Autónoma de Tamaulipas, y a través de su rector el doctor Damaso Anaya Alvarado, mando un reconocimiento a todo el equipo de la UAT.
Los cambios en la casa de estudios de Tamaulipas han sido para bien, como lo expresa el gobernador Villarreal Anaya, la investigación es parte esencial del estado, y la docencia de alto nivel, en la UAT, tiene un nicho único e insustituible.
También enfatizo el gobernador, en no trastocar la autonomía universitaria, donde la Universidad, mantiene firme su derecho a tomar sus decisiones, que bajo el mandato del rector Anaya Alvarado han sido correctas, y el crecimiento en poco tiempo se nota y se siente en el aprendizaje profesional y medio superior.
La alianza entre el estado y la universidad se da en un marco de absoluto respeto en la autonomía, sin injerencias y sin presiones, para que la máxima casa de estudios siga siendo un ejemplo, para las generaciones futuras.
chanorangel@live.com.mx